PROBATIO PENNAE significa PRUEBA DE PLUMA y se refiere a los trazos realizados para comprobar el correcto funcionamiento del útil.
Las plumas de ave se desgastaban por su continuo roce con el soporte, por lo que a menudo debían ser cortadas y perfiladas para mantener la calidad de la grafía. Una vez arregladas, se comprobaba el efecto sobre el papel. Esta prueba también se realizaba para constatar la viabilidad de las diferentes tintas, en cuanto a su pigmentación, viscosidad y adherencia.
La probatio pennae podía ser textual, figurativa o mixta, como la de la imagen.
Imagen: Probatio Pennae, 1560. Archivo de la Real Chancillería de Granada. Fuente imagen:https://goo.gl/FMCkQw